La urbanización ‘Mirador del Pinar’, perteneciente al Barrio de San Andrés, se ha convertido en un espacio cardioprotegido al disponer de un desfibrilador en la comunidad para poder revertir una posible parada cardiorespiratoria.
Se trata de la primera comunidad de vecinos de Navalcarnero en disponer de un desfibrilador, siendo apenas unas 60 urbanizaciones en toda España de las que disponen de este material, y residentes con conocimientos para su utilización.
“Hay un 70-80% de posibilidades de que una parada cardiorespiratoria tenga lugar en el propio domicilio, por lo que el hecho de disponer de este medio podría aumentar potencialmente las probabilidades de salvar una vida, así como, de mejorar la calidad de la persona afectada”, manifestó el promotor de esta iniciativa, Daniel Mercado, vecino de la urbanización y personal de Emergencias del Ayuntamiento de Madrid.
Además, al ser una urbanización formada por 197 viviendas, con muchos vecinos, y con instalaciones donde se practican deportes, como pista de pádel y piscina en época estival, el ser un espacio cardioprotegido aumenta la calidad de vida de todos los propietarios, inquilinos y visitas de familiares.
