En primer lugar determinar qué necesidades tiene Madrid, es decir, qué precisan los ciudadanos y ciudadanas y, a continuación, ver cómo obtener los recursos para hacerlas frente. Son los ejes sobre los que articula su política fiscal el concejal de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, que hoy ha presentado las líneas generales del área y a los miembros del equipo que le acompañan para conseguir una mayor y mejor redistribución de las cargas y recursos. En plena elaboración de los presupuestos municipales para 2016, el edil ha anunciado una subida del gasto social, para hacer frente a las necesidades de la población.
El Impuesto para Bienes Inmuebles (IBI) bajará de forma significativa para todas las viviendas de uso residencial, mientras que se incrementará para inmuebles de uso no residencial que superen elevados valores catastrales. El objetivo es desplazar la carga fiscal hacia aquellos que más tienen. Se realizará además una reconfiguración de exenciones encaminada a lograr una bonificación a los centros públicos de investigación y para que desaparezca la bonificación para inmuebles de Patrimonio Histórico con actividades lucrativas.
Durante el encuentro informativo celebrado en la sede del área de Economía y Hacienda, Sánchez Mato ha abogado por un incremento del gasto para atender aquellas necesidades sociales no cubiertas hasta ahora y para equipamientos de los distritos, especialmente en las zonas más deprimidas de la capital y afectadas por la crisis. «Madrid tiene capacidad de atender las necesidades de las áreas y de los distritos en un porcentaje muy alto».
Reducción del IBI
Respecto a la bajada del IBI, se registrará un descenso «generalizado y significativo» para inmuebles de uso residencial. «No será una bajada cosmética», apuntó el concejal, sino que beneficiará a las los recibos de 1.448.765 viviendas de la ciudad. Al mismo tiempo está previsto que suba el recibo para los inmuebles de uso no residencial de muy alto valor catastral, un pequeño porcentaje de grandes superficies. El Gobierno municipal estudia también establecer una tasa a los generadores de grandes residuos. «Se trata de subir el tipo impositivo a los que más tienen», argumentó Carlos Sánchez Mato, ya que la clave es racionalizar los recursos para ser más eficaces y cercanos en el servicio al ciudadano.
Nueva Agencia Tributaria
Los retos presupuestarios pasan por un sistema fiscal más justo -ha explicado Carlos Sánchez Mato-, razón por la que se ha remodelado la Agencia Tributaria, al frente de la que está el funcionario de carrera José Antonio Díaz de Cerio.
La reordenación de la Agencia Tributaria ha recurrido a los méritos y la experiencia de funcionarios municipales. Se reducen de ocho a cinco las subdirecciones generales; las jefaturas de servicio pasan de 29 a 22; y de 60 a 48 las jefaturas de departamento.
Esto supone una reducción inicial de 22 puestos de alto nivel en su estructura.
El Ayuntamiento crea la subdirección general de Atención al Contribuyente, con el personal integrado en el Servicio de la Oficina de Atención Integral al Contribuyente (que depende de Gestión Tributaria) y parte del personal que ahora presta servicios de atención en Recaudación.
El responsable de las arcas municipales ha estado acompañado por los cuatro directores generales de la Concejalía (Contratación, Hacienda, Patrimonio y Economía, además de la Secretaría General Técnica), por el nuevo responsable de la Agencia Tributaria, José Antonio Díaz de Cerio, y por su jefa de gabinete, Esther López Barceló./
