El Ayuntamiento de Alcorcón ha solicitado a la Comunidad de Madrid la firma de un convenio de colaboración en relación con las vías pecuarias de la ciudad, los corredores naturales creados para unir distintas zonas de pastoreo donde los ganaderos pudieran conducir sus cabañas de ganado en las diferentes épocas del año hacia terrenos con mejores condiciones climatológicas y mayor provisión de comida.
“Tras la época de confinamiento y la posibilidad de realizar paseos han sido muchos los ciudadanos que han utilizado los caminos de la ciudad y hemos detectado una grave situación”, ha anunciado la alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés y ha señalado que “hemos recibido muchas denuncias y solicitudes de vecinos para mejorar esta situación. Tras un análisis, hemos concluido en que es cierto que hay que potenciar y mejorar estas zonas”.
La alcaldesa ha explicado que, de acuerdo con el inventario de la Comunidad de Madrid, en el término municipal de Alcorcón hay 11 vías clasificadas: 4 veredas, 4 coladas, 2 abrevaderos y 1 descansadero.
-Colada de Esparteros y de la Canaleja (1º tramo)
-Colada de Esparteros y de la Canaleja (2º tramo)
-Vereda de Castilla
-Vereda de los Barros
-Vereda de Segovia
-Vereda de Villaviciosa
-Colada de Pozuelo
-Colada de Móstoles y Fuente Cisneros
-Abrevadero de la Fuente de la Canaleja
-Descansadero de La Princesa
-Abrevadero de Fuente Cisneros
De estas 11 vías, solo una está deslindada: la colada de Pozuelo. Dado que el resto no están deslindadas, con límites definidos, no se ha procedido al amojonamiento que es acto administrativo que determina los límites de la vía pecuaria y su señalización mediante mojones sobre el terreno.
“Esta falta de gestión provoca que muchos de los trazados de las vías pecuarias del municipio han sido alterados”, ha indicado “en muchas ocasiones las tierras de cultivo van ocupando parte de la superficie y las vías pecuarias pierden su anchura. En otras ocasiones, el uso de los vehículos motorizados ajenos a los usos de agricultura produce destrozos en el terreno, aparecen vertidos incontrolados, especialmente de escombros y enseres…”.
“Esto es lo que queremos evitar; el objetivo es salvaguardar las vías pecuarias porque es un patrimonio de todos los ciudadanos, y evitar que se produzcan estos vertidos incontrolados”, ha indicado.
De Andrés ha añadido que “además, la falta de vigilancia y control por parte del órgano gestor hace impune que estos actos puedan ser sancionados y, debido al crecimiento de vertidos, nos vemos en la obligación de vigilar y limpiar zonas rurales que por competencia jurídica corresponden a la Comunidad de Madrid. Esta tarea la asumimos desde el Ayuntamiento en la responsabilidad de proteger y preservar y conservar el medio ambiente y el entorno más próximo con recurso propios materiales, personales y económicos”.
Por ello, “planteamos a la Comunidad de Madrid que asuma sus competencias, instamos a la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad de la Comunidad de Madrid que deslinde las vías, que amojone las mimas, que haga vigilancia e inspección, planteamos que mantenga en correctas condiciones de seguridad, salubridad y ornato público las vías pecuarias y que se promueva la conexión entre los municipios a través de las vías pecuarias”.
Para facilitar todo esto, solicitamos que impulsemos un convenio de colaboración para dotar a la entidad local de los recursos que puedan dar respuesta a todo ello; si la Comunidad no asume sus competencias, instamos a la firma de un convenio para que podamos poder desarrollarlo nosotros adecuadamente”.
